Segunda Presidencia de Juan Domingo Perón
En esta nota, vas a poder leer acerca de la segunda presidencia de Juan Domingo Perón, que fue desde 1952 hasta 1955, interrumpida por un golpe de estado en septiembre de 1955. Además leerás acerca del bombardeo a la Plaza de Mayo.
Juan Domingo Perón asume por segunda vez al poder el 4 de junio de 1952, pero, con una diferencia a la primera vez, sin su vicepresidente Quijano, el cual había fallecido un mes antes de la asunción al poder. Sin embargo, Perón fue acompañado por un Congreso con 135 diputados peronistas contra únicamente 14 radicales, y por la totalidad de los senadores. A dos meses del comienzo de la nueva presidencia de Perón, fallece su esposa, María Eva Duarte, la cual a pesar de haber fallecido, consiguió más reconocimiento y cariño por parte de la gente en un velatorio el cual duró 14 días.
Durante la segunda guerra mundial, Argentina se había enriquecido exportando recursos a los países europeos participantes de dicha guerra, principalmente a Gran Bretaña. Aquellos años habían sido una época de gran prosperidad para el país, pero lamentablemente, en los años siguientes, debido a la fuerte llegada de Estados Unidos al mercado europeo y a que los países de allí no podían comprar mucho, todas las exportaciones de Argentina fueron decayendo poco a poco. Además, las reservas acumuladas en Argentina, se consumieron rápida y excesivamente, finalizando así con nuestro periodo de gran prosperidad económica.
En este contexto, la oposición al peronismo fue creciendo, los empresarios no estaban de acuerdo con los beneficios sociales que se les había otorgado a los obreros; los propietarios rurales estaban disconformes por la falta de ayuda del gobierno al sector agrario; las Fuerzas Armadas se oponían a las movilizaciones obreras y a la subordinación al poder ejecutivo; la Iglesia Católica se distanció del peronismo por su fuerte intervención en materia educativa y reaccionó ante la prohibición de la enseñanza religiosa en las escuelas.
Debido al gran desacuerdo de la oposición peronista con Perón, el 16 de junio de 1955 a las 12:30, comenzó un suceso histórico en Argentina, el bombardeo a La Plaza de Mayo. El principal objetivo de este bombardeo se dice que era la muerte de Perón y así llegar a concretar un golpe de estado para remover al peronismo del poder. Aunque para la desgracia de la oposición, no pudieron alcanzar su objetivo de matar al presidente de ese momento, porque se había resguardado en el ministerio de guerra, murieron 308 personas en ese suceso.
Imagen del bombardeo a la Plaza de Mayo el 16 de junio de 1955.
Finalmente, el 16 de septiembre de 1955, las Fuerzas Armadas, con la ayuda de otros partidos, que iban desde el más tradicional conservadurismo hasta el socialismo, iniciaron en Córdoba un movimiento con el fin de, esta vez sí, remover a Perón del poder. Como cabeza de este movimiento, se encontraba el general Eduardo Lonardi, quien apenas empezó el día, ya dio la señal para empezar con los movimientos. El primer objetivo era la toma de la Escuela de Infantería de Córdoba, el cual, tras casi ocho horas de batalla, se consiguió concretar. Para la tarde de ese mismo día, los insurrectos ya tenían el control de varias radioemisoras y comenzaban a proclamar por todo el país lo que sucedería. Cuando todo indicaba que Córdoba caería, la situación cambió totalmente, cuando al mediodía del 19 de septiembre, el presidente Juan Domingo Perón hizo pública una carta donde acepta renunciamientos personales para evitar un enfrentamiento sangriento. Aunque en la carta Perón no mencionaba su retirada del poder, las fuerzas leales se desarmaron y los rebeldes se alentaron. La respuesta de la Marina fue terminante: si Perón no dejaba el poder, la Capital Federal sería bombardeada. Como consecuencia de esto, el día 20 de septiembre, los jefes de ambos bandos se reunirían para llegar a la salida de Perón del poder. Luego de esa reunión, se llegó al acuerdo que Perón dejaría el poder y que asumiría Lonardi como presidente provisional, y que todas las fuerzas volverían a sus bases para esperar las órdenes del nuevo gobierno.
El 23 de septiembre, mientras Perón partía hacia el exilio, una multitud compuesta mayoritariamente por sectores de clase media y alta, colmó la Plaza de Mayo para aclamar al nuevo presidente provisional, Eduardo Lonardi, el general que había encabezado el reciente golpe de estado.
Perón a punto de ser exiliado. 
Eduardo Lonardi, presidente provisional que asumió cuando Perón fue exiliado.
Comentarios
Publicar un comentario